Una de las historias más tiernas del mundo sucedió en una ciudad del centro de Argentina, Villa Carlos Paz y tiene como protagonista a un hermoso perro mestizo llamado Capitán que, lamentablemente falleció este lunes a los 15 años.
La noticia de su muerte conmovió a todos los habitantes de la ciudad y del país, pues la historia de este bello y fiel perro se conoció en el 2012, cuando un diario dio a conocer los detalles de “Capi”, como lo llamaban cariñosamente.
Incluso un equipo de productores audiovisuales de Francia llegó a la ciudad para filmar al perro y contar su historia, la que hoy llega a su final.
Desde el 2007, Capitán dormía junto a la tumba de su dueño.
Capitán logró fama mundial debido a su emotivo gesto de lealtad y amor.
Desde 2007 Capitán vivía en la tumba de su amo, y allí fue hallado sin vida este lunes, en su tumba en el cementerio.
Capitán tenía alrededor de 15 años y estaba enfermo, pues hacía unos años se le había detectado una insuficiencia renal crónica, que le provocaba vómitos y un estado de somnolencia.
Capi murió este lunes a causa de su avanzada edad y las enfermedades que lo aquejaban.
El perro llegó al cementerio meses después de que falleciera su amo.
Nadie sabe cómo hizo Capitán para llegar al cementerio.
El fiel perro caminaba con dificultad y se había quedado parcialmente ciego. Pero no abandonaba la tumba de su dueño.
«El perro tenía una insuficiencia renal que arrastrabas desde hacía 4 años y por la cual recibía una alimentación especial que le daba la gente de FUPA”, contó el veterinario Cristhian Stempels a un medio local.
FUPA es una organización que se encarga de rescatar animales abandonados y darlos en adopción responsable.
La historia de Capitán se conoció en 2012 y conmovió a todo el mundo.
Todos los días a las 6 de la tarde se acurrucaba junto a la tumba de Miguel, su dueño.
Nunca dejaba el cementerio, era feliz entre las tumbas y flores.
“Lamentablemente su edad y esta condición, hicieron que no pudiera resistir, podríamos haberlo internado, pero era para que muriera en la veterinaria, así que preferimos dejarlo y atenderlo en el cementerio, donde él vivía y se sentía tranquilo” explicó el profesional.
Miguel Guzmán se llamaba su dueño, que falleció en marzo de 2006, y a los pocos meses de su muerte el animal desapareció de la casa.
Aunque la familia de Miguel lo dio por perdido, o pensó que había muerto, unos meses después, en una visita al cementerio, notaron que el perro había seguido el rastro de su dueño y se había instalado a vivir allí, al lado de su tumba, en el cementerio municipal de Villa Carlos Paz.
Uno de los datos más sorprendentes es que Miguel falleció en el hospital de la ciudad, de ahí su cuerpo fue trasladado a la casa velatoria, muy lejos de la casa donde vivían. Luego, el cuerpo fue enterrado en el cementerio.
Y la familia asegura que Capitán nunca los acompañó, ni al hospital, ni a la sala velatoria ni al cementerio, sino que permaneció en su casa, extrañando a su dueño.
Con 15 años, y tras soportar durante 4 años una enfermedad, Capitán dejó este mundo.
La familia de Miguel lo visitaba, pero sabían que el cementerio es el lugar que eligió para vivir.
Capitán vivió 11 años en el cementerio y todas las noches durmió junto a la tumba de su dueño.
Todos en Villa Carlos Paz conocían a «Capi».
“El perro apareció acá solo y dio vueltas por todo el cementerio, hasta que llegó también solo a la tumba de su dueño. No lo llevó nadie hasta ahí. Y eso no es todo: cada día, a las seis de la tarde, va y se acuesta frente a esa tumba” contó Héctor Baccega, director del Cementerio municipal de Villa Carlos Paz.
“Capitán recorre el cementerio conmigo todos los días. Pero cuando llega esa hora se va para el fondo, donde está la tumba de su amo. Este perro nos da una lección. Creo que los humanos tendríamos que apreciar más los recuerdos de los que se nos van. Los animales nos enseñan tanta fidelidad”, había dicho en el 2012 Baccega.
Ahora Capitán se ha encontrado con Miguel, después de esperar por él durante 11 años.
Esto es lo que contaban sobre Capitán en el año 2013.
¡Qué tierna historia! Compártela con todo el mundo para que conozcan el fiel espíritu de Capitán, un perro que siempre será recordado.