Lamentablemente en algunos casos la celebración de un matrimonio lejos de ser un momento feliz se convierte en una pesadilla. En algunas culturas el matrimonio infantil es muy común, muchas niñas son obligadas a casarse a pesar de que eso representa una violación a los derechos humanos, generando consecuencias terribles para ellas que van desde embarazos precoces hasta la muerte.
Nada Al-Ahdal es una niña de Yemen, tiene 10 años de edad y fue víctima de la cultura en la que ella representaba para su hogar una carga y podría ser intercambiada tal como si se tratara de un objeto por dinero. Pero ella decidió marcar la diferencia y tuvo la valentía de decir: ¡No! Sus padres trataron de casarla con un hombre de 26 años y ya habían hecho la negociación para la boda, pero una semana antes Nada Al-Ahdal logró huir del terrible destino que le esperaba.
Todo fue gracias a la ayuda de su tío Abd Al-Salam que durante sus vacaciones de verano le ofreció la oportunidad de estudiar y eso le hizo ver el mundo de otra forma. ¡Tienes que escucharla!
Ella quería lograr sus sueños, quería recibir la educación que le correspondía por derecho y por eso se atrevió a escapar. Contó a través de un video todo su sufrimiento alegando que “Estoy mejor muerta. Prefiero morir”, en caso de ser forzada a casarse.
La terrible experiencia de esta pequeña ha conmovido al mundo entero y su tío se convirtió en el héroe que la rescató de esa pesadilla que lamentablemente muchas niñas tienen que vivir. Él ya la había salvado una vez diciéndole al novio que ella era muy pobre hasta que lo convenció de desistir.
En la segunda oportunidad sus padres la amenazaron con matarla, pero ella pudo vencer el miedo y alzar su voz. Presentó una denuncia a la policía y su mensaje está dando la vuelta al mundo.
Ahora Nada Al-Ahdal vive bajo la protección de su tío y representa la voz de todas las niñas que como ella crecen en un hogar donde sus propios madres las consideran un bien que pueden vender para lucrarse sin importar las consecuencias, sin sentir compasión por todo el sufrimiento que representa perder por completo la infancia, los derechos, la libertad y la capacidad de integrarse y desarrollarse en el mundo de manera normal.
¡Cuánto dolor nos da escuchar este testimonio! Es terrible saber que en el corazón de esas familias la prioridad no es el amor y el respeto a la vida. Son muchas las niñas que han muerto a manos de torturas violentas incluso a un día de haberse casado.
Esta realidad tiene que acabarse, podemos ayudar difundiendo el mensaje de Nada Al-Ahdal a quien admiramos y apoyamos por mantenerse firme y valiente. ¡Compártelo!
