Algunos pacientes son víctimas de la negligencia de los profesionales de la salud, lamentablemente a veces los errores de los médicos tienen consecuencias irreversibles. Ellos asumen el compromiso de velar por el bienestar de cada paciente, su vida está en sus manos y cualquier falla podría ser fatal.
María Dronova, de 89 años, padecía una severa infección en su pierna derecha, tenía gangrena, vivía en Voronezh, una ciudad rusa.
Cuando tenía 16 años, en 1945, fue liberada del campo de concentración nazi después de haber sido capturada en la época de la segunda guerra mundial. Años más tarde se convirtió en una profesora de matemáticas con excelente trayectoria.
Ante la enfermedad que padecía, su hijo Andrei Dronov la trasladó a un hospital para que recibiera la atención médica necesaria.
El pasado 4 de noviembre los médicos le diagnosticaron a su madre gangrena en la pierna derecha, no mencionaron que tuviera algún padecimiento en su pierna izquierda, eso estaba respaldado por los estudios médicos a los que había sido sometida María en otro centro hospitalario.
Después de que un doctor la examinara fue sometida a un procedimiento quirúrgico para amputar su pierna.
“Le vendaron la pierna derecha durante la cirugía, su pierna izquierda estaba roja, pero nadie planeó amputarla”, dijo Andrei.
Los médicos amputaron la pierna izquierda por error, dijeron que no había ocurrido algo similar en el hospital.
Pero tuvieron la intención de encubrir su grave error. “Los registros médicos de mi madre desaparecieron y llamé a la policía. Les pedí que trajeran los documentos y la extremidad amputada para evitar los que los médicos pudieran desmentir lo que había ocurrido”, dijo Andrei.
El caso llegó a los medios de comunicación, las primeras hipótesis planteaban que la paciente tenía gangrena en ambas piernas. Habían transcurrido tres días desde la cirugía cuando la trasladaron al quirófano para amputar su pierna derecha, después intentaron falsificar los informes.
El hijo de la víctima aseguró que un médico reconoció el error inmediatamente después de que su madre saliera del quirófano.
“Como resultado, mi madre se quedó sin las dos piernas”, dijo Andrei a un medio de comunicación local.
“Gracias a Dios ella está superando esta prueba. No sé qué pasará después, pero tengo la intención de hacer que los responsables de cortarle a mi madre la pierna sana sean castigados”.
El hijo de María describe la experiencia que vivieron como “algo sacado de una película de terror”. Katya, la esposa de Andrei fue a visitar a su suegra tras la operación y notó el error, se quedó pálida y apenas podía estar en pie.
“No sé cómo decirte esto…amputaron la pierna equivocada”, aseguró Katya.
Andrei interceptó al médico y exclamó: «Dije -‘ ¿tienes ojos? ¿Qué está escrito en sus papeles? ¡Pierna derecha!'»
Ante esto, los médicos después quisieron ocultar su negligencia diciendo que las dos piernas tenían gangrena y la izquierda estaba en peligro.
Sergey Shamsutdinov, director médico del hospital, se pronunció sobre el caso declarando ante los medios de comunicación que en el momento en el que María ingresó al hospital su pierna izquierda estaba más afectada.
El hijo de la víctima se mostró indignado ante estas declaraciones y asegura que el doctor está mintiendo. Las autoridades del Estado han iniciado una investigación sobre el caso.
Nada podrá recuperar la pierna de María, ni el trauma psicológico que supone haber perdido su extremidad de esta forma quedándose sin sus dos piernas. Los responsables deben ser condenados por su crimen, comparte esta noticia.