Los misteriosos caminos de la vida dejan varios momentos y situaciones sin ninguna explicación; y, aunque se investigue profundamente sobre el asunto, muchos casos parecen no tener ninguna lógica. Un ejemplo perfecto a esto es un reciente suceso ocurrido en Indonesia.
A finales de enero del 2017, los familiares de Nining Sunarsih y ella se encontraban veraneando en una playa de Indonesia, específicamente en el balneario de Citepus, ubicado en la isla de Java. Mientras ella se bañaba en el mar, una gran ola la arrastró a mar adentro.
Lastimosamente, ninguno de sus familiares, ni los demás usuarios de la playa pudieron hacer algo y tuvieron que presenciar la dolorosa escena de ver cómo desparecía la mujer.
Los familiares alertaron lo sucedido a la policía que rápidamente inició una búsqueda en el mar, pero después de varios días, la operación fue terminada y la mujer desaparecida fue dada por muerta.
Sin embargo, algo muy especial giraba en torno a este caso y es que el padre de Nining jamás pensó que ella hubiese muerto en el incidente; de hecho, tenía recurrente sueños que alimentaban su esperanza de vida.
En los sueños, el padre de Nining veía cómo su hija estaba en la misma playa de dónde fue arrastrada por la ola. El señor pensaba que era un sueño como cualquier otro, pero pudo verlo en tan reiteradas ocasiones, tanto así que decidió ir él mismo al balneario de Citepus.
Así que un sábado, el hombre fue al último lugar donde vieron con vida a Nining Sunarsih. Y, aunque ya habían pasado 18 meses desde la desaparición de la mujer, su padre fue junto a sus familiares y estuvieron recorriendo toda la playa sin encontrar ningún rastro hasta que pasada la medianoche encontraron algo que los dejó boquiabiertos.
A tan solo unos 500 metros de donde desapareció estaba Nining con la misma vestimenta que usaba en enero del 2017. La mujer estaba inconsciente, fue trasladada a su casa y allí un equipo de médicos la evaluó y examinó para determinar su estado de salud.
Al final, los médicos concluyeron que la mujer estaba estable y sin heridas graves, pero presenta dificultad para comer y beber, y también para hablar, por lo que aún no ha dado ninguna declaración.
La aparición de Nining crea cierta sospecha en las autoridades costeras que indican que, según su registro, nunca hubo una denuncia formal de la desaparición y que tampoco era temporada de olas grandes para esa fecha; sin embargo, dicen que es frecuente que una familia pierda a niños pequeños o adultos mayores.
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