En cualquier lugar del mundo, por muy grande o muy pequeño que sea siempre podrás encontrar a un padre luchando por el futuro de su hijo, con muchos recursos o con muy pocos siempre están ahí asegurándose de que sus pequeños tengan bienestar y que puedan lograr sus sueños.
Padres biológicos, de crianza o adoptivos que pasan toda una vida dedicada a sus hijos. Y es que cuando una persona toma la responsabilidad de otro ser humano con verdadero amor y compromiso no importan los lazos sanguíneos sino el cariño y el deseo de darle un mejor futuro.
Así es el caso de Blas Romero, mejor conocido en su comunidad como Kambai Romero, padre de Yudit Romero, originarios de Paraguay, quien con mucho esfuerzo logró que su su hija viajara a a Argentina con la idea de que lograra obtener un título universitario para poder optar por un mejor futuro.
Pero esto no fue para nada fácil, pues el señor Blas, quien trabaja de albañil, tuvo que esforzarse mucho junto a su esposa, que trabaja como costurera, para que su hija tuviera la oportunidad de estudiar, crecer, desarrollarse y tener la oportunidad de convertirse en una mujer exitosa.
Y aunque su lucha duró unos cuantos años, la joven Yudit ha logrado graduarse como licenciada en Ciencias de la Educación. Por supuesto, Yudit estaba mucho más que agradecida así que, apenas obtuvo su título, no dudó en regresar a casa y darle las buenas nuevas a su familia.
La joven se dirigió de nuevo a su pueblo Mayor Martínez, en Paraguay, para reencontrarse con su padre y poder agradecerle en persona. Sin embargo, Yudit no quería que el momento fuera pasajero, así que llevo un acompañante para que grabara el inolvidable acontecimiento.
En el video se puede ver cómo una Yudit muy arreglada llega a un terreno en construcción donde, a través de los huecos de las ventanas de la estructura, se asoma y llama a su padre. Blas, muy alegre, sale a recibir a su hija, pero lo que este hombre no esperaba eran las palabras que recibió de ella.
Al momento de ver a su padre salir, el primer gesto de la joven es entregarle su título al mismo tiempo que le agradece todo el esfuerzo que ha hecho para que ella haya podido graduarse.
La joven le agradece a su padre y madre:
Te entrego mi trabajo, mi investigación, te doy gracias porque este esfuerzo y este logro es de ustedes también”, comenta la joven sin poder evitar derramar algunas lágrimas.
El emotivo encuentro termina con ambos, padre e hija, abrazados compartiendo la alegría por la graduación de la joven.
Sin duda, esta es otra muestra de que el que persevera, vence; y, que mientras cuentes con personas a tu lado que te apoyen y crean en ti, no hay meta que sea inalcanzable.
¡Comparte el inspirador video con todos tus amigos y recuérdales que nada es imposible!